Los herederos de Silvino Cordero afirman que la medida cautelar que paraliza la entrega del complejo al Ayuntamiento permite aprovechar la campaña de esquí.
Los antiguos gestores del camping de La Raya (Aller), en el puerto de San Isidro, pretender reabrir las instalaciones para la temporada de esquí que se abrirá en breve. El Ayuntamiento de Aller dio por finalizada la concesión a los herederos del empresario fallecido Silvino Cordero, impulsor del camping, el pasado mes de agosto. Esa decisión no sentó bien a los antiguos gestores, que presentaron un recurso judicial para intentar conseguir una subrogación del contrato firmado en su día por el Ayuntamiento de Aller y Silvino Cordero. El Juzgado aún no ha dictado sentencia, pero ha aceptado como medida cautelar que los edificios no se cedan al Ayuntamiento ni se derriben hasta que haya un fallo firme.
La familia Cordero ve en esa decisión una puerta abierta para seguir con su actividad. "Abriremos hasta que haya juicio", explicó ayer Fernando Cordero, sobrino del impulsor del camping.
En 1985 Silvino Cordero acordó con el Ayuntamiento la construcción de un camping y una cafetería en terreno municipal. El contrato incluía una cláusula según la cual a su muerte, los terrenos volverían a ser propiedad municipal y los herederos tendrían que decidir entre ceder el equipamiento al Consistorio o derribarlo. El promotor del camping murió en noviembre de 2012 y el Ayuntamiento inició la tramitación para quitar la concesión a la familia. El pleno rechazó en verano la subrogación, a pesar de que un informe del secretario municipal incluía esta posibilidad siempre que hubiera un acuerdo plenario.
La medida cautelar aprobada ahora por el juez se vincula al pago de una fianza de 12.000 euros por parte de la familia Cordero. La cuantía se destinará a indemnizar al Ayuntamiento, si gana el juicio, en concepto de los atrasos por el canon que no percibirá estos meses.
Fuente: INE
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